viernes, 13 de febrero de 2009

12 Consejos de amabilidad entre Excursionistas

A continuacion os ofrecemos una traduccion de una divertido artículo publicado hace unos días en Bravenewtraveler, con 12 consejos de amabilidad entre EXCURSIONISTAS de todo el mundo. Si cuando sales los usas, seguro que volverás con unos cuantos amigos de más y muchisimas experiencias nuevas!

1. Cuando viajes con amigos, invita a los viajeros que te encuentres solos a compartir algo de comida o bebida.
2. Ofrecete para cuidar las cosas de otros viajeros en la estación del bus mientras compran sus tickets
3. Llevate una revista y un paquete de galletas o embutido de tu país, así cuando te encuentres a un compatriota que lleve tiempo viajando, le darás una alegría
4. Si tienes q salir por la noche o pretendes llegar muy tarde a la habitacion, deja antes de salir tu cepillo de dientes y cosas que necesites sobre tu cama, de esta manera evitarás hurgar en tu mochila a las 4 de la mañana…
5.Llama o envia un mensaje a tus amigos por su cumpleaños, eso les mostrará lo mucho que te acuerdas de ellos incluso en el Amazonas
6.Si en un avión te sientan al lado de un pasajero nervioso por volar, hablale durante el despegue y el aterrizaje, asi se olvidará de ello
7. Usa bolsas de tela para tus cosas mejor que las de plástico, tus compañeros de habitación te lo agradecerán por las mañanas…
8. Llevate un par de tapones para los oidos de sobra, así podrás ofrecerselos a aquellos que les cueste dormir en habitaciones ruidosas
9. Cuando montes en un bus local, paga tambien el billete de la persona que venga detrás de ti
10. Llevate una bolsita de comida de perro seca así podrás alimentar a los animales abandonados que te encuentres en tus paseos por la ciudad
10. Apoya los nuevos comercios que te encuentres, no sólo los que veas en las guías
11. Si te sacas fotos con otros viajeros, acuerdate despues de enviárselas por correo electrónico.
12. Llama a mamá habitualmente y cuéntale dónde estas

Manual para subir Montañas


A) Escoge la montaña que deseas subir: no te dejes llevar por los comentarios de los demás, que dicen "ésa es más bonita",o "aquélla es más fácil". Vas a gastar mucha energía y entusiasmo en alcanzar tu objetivo, y por lo tanto eres tú el único responsable y debes estar seguro de lo que estás haciendo.

B) Sabe cómo llegar frente a ella: muchas veces, vemos la montaña de lejos, hermosa, interesante, llena de desafíos. Pero cuando intentamos acercarnos, ¿qué ocurre? Que está rodeada de carreteras, que entre tú y tu meta se interponen bosques, que lo que parece claro en el mapa es difícil en la vida real. Por ello, intenta todos los caminos, todas las sendas, hasta que por fin un día te encuentres frente a la cima que pretendes alcanzar.

C) Aprende de quien ya caminó por allí: por más que te consideres único, siempre habrá alguien que tuvo el mismo sueño antes que tú, y dejó marcas que te pueden facilitar el recorrido; lugares donde colocar la cuerda, picadas, ramas quebradas para facilitar la marcha. La caminata es tuya, la responsabilidad también, pero no olvides que la experiencia ajena ayuda mucho.

D) Los peligros, vistos de cerca, se pueden controlar: cuando empieces a subir la montaña de tus sueños, presta atención a lo que te rodea. Hay despeñaderos, claro. Hay hendiduras casi imperceptibles. Hay piedras tan pulidas por las tormentas que se vuelven resbaladizas como el hielo. Pero si sabes dónde pones el pie, te darás cuenta de los peligros y sabrás evitarlos.

E) El paisaje cambia, así que aprovéchalo: claro que hay que tener un objetivo en mente: llegar a lo alto. Pero a medida que se va subiendo, se pueden ver más cosas,y no cuesta nada detenerse de vez en cuando y disfrutar un poco del panorama alrededor. A cada metro conquistado, puedes ver un poco más lejos; aprovecha eso para descubrir cosas de las que hasta ahora no te habías dado cuenta.

F) Respeta tu cuerpo: sólo consigue subir una montaña aquél que presta a su cuerpo la atención que merece. Tú tienes todo el tiempo que te da la vida, así que, al caminar, no te exijas más de lo que puedas dar. Si vas demasiado deprisa, te cansarás y abandonarás a la mitad. Si lo haces demasiado despacio, caerá la noche y estarás perdido. Aprovecha el paisaje, disfruta del agua fresca de los manantiales y de los frutos que la naturaleza generosamente te ofrece, pero sigue caminando.

G) Respeta tu alma: no te repitas todo el rato "voy a conseguirlo. "Tu alma ya lo sabe. Lo que ella necesita es usar la larga caminata para poder crecer, extenderse por el horizonte, alcanzar el cielo. De nada sirve una obsesión para la búsqueda de un objetivo, y además termina por echar a perder el placer de la escalada. Pero atención: tampoco te repitas "es más difícil de lo que pensaba", pues eso te hará perder la fuerza interior.

H) Prepárate para caminar un kilómetro más: el recorrido hasta la cima de la montaña es siempre mayor de lo que pensabas. No te engañes, ha de llegar el momento en que aquello que parecía cercano está aún muy lejos. Pero como estás dispuesto a llegar hasta allí, eso no ha de ser un problema.

I) Alégrate cuando llegues a la cumbre: llora, bate palmas, grita a los cuatro vientos que lo has conseguido, deja que el viento allá en lo alto (porque allá en la cima siempre hace viento) purifique tu mente, refresca tus pies sudados y cansados, abre los ojos, limpia el polvo de tu corazón. Piensa que lo que antes era apenas un sueño, una visión lejana, es ahora parte de tu vida. Lo conseguiste.

J) Haz una promesa: aprovecha que has descubierto una fuerza que ni siquiera conocías, y dite a ti mismo que a partir de ahora, y durante el resto de tus días, la vas a utilizar. Y, si es posible, promete también descubrir otra montaña, y parte en una nueva aventura.

K) Cuenta tu historia: sí, cuenta tu historia. Ofrece tu ejemplo. Di a todos que es posible, y así otras personas sentirán el valor para enfrentarse a sus propias montañas.

Paulo Coelho

El Mundo de la Montaña


La montaña es fascinación. Es sentir cuan pequeños y frágiles somos. Es sentir la dependencia de "todo" y de "todos". Es la Vida.

"Si la montaña no desciende contigo para los demás, si no transmites la paz de las cumbres, la sonrisa del amanecer, la alegría de un torrente, la limpieza de la nieve, la verdad que allí se encierra, la luz de la fugaz estrella que admiraste, el calor del fuego que prendiste, el silencio de la noche que sentiste, la entereza de la roca que escalaste. Si ellos no adivinan que subiste hoy y mañana, entonces perdistes el tiempo en la montaña".

Mas Hada

¿Que es el Montañismo?


El montañismo (derivado de montaña, con el sufijo "ismo": del latín "ismus") es la disciplina que consiste en excursionar por las montañas. Es también el conjunto de técnicas, conocimientos y habilidades que nos permiten realizar este objetivo. El montañismo es un deporte, pero quienes lo realizan están convencidos de que es mucho más que eso.

El montañismo se encuentra dividido en doce especialidades: senderismo, media montaña, alta montaña, alpinismo, expediciones, escalada deportiva, escalada clásica —subdividida a su vez en escalada en roca y escalada en hielo—, esquí de travesía, barranquismo, duatlón en montaña, media maratón de montaña y maratón de montaña.

El término montañismo muchas veces se entiende como el practicado en las altas montañas, es decir, el montañismo de altura. Así quien asciende a las montañas se le llama montañista y no a quién solo practica una de las especialidades mencionadas. También cuando se habla de un curso o manual de montañismo, éste se enfoca al excursionismo por las montañas y no a toda la gama de especialidades que se mencionan. Alpinismo es otra palabra para hacer referencia al montañismo, sin embargo, tiene su origen en la denominación específica de excursionar por los Alpes por lo que montañismo es más adecuado.

Las doce especialidades pueden agruparse en cuatro grupos por su afinidad. Con ello se simplifican también los materiales, las técnicas y los entrenamientos.

Estos grupos son:
1. Área de marcha. - senderismo - media montaña - alta montaña - expediciones.

2. Área de escalada. - escalada en roca - escalada en hielo - escalada deportiva.

3. Área de resistencia. - duatlón en montaña - media maratón de montaña - maratón de montaña.

4. Área de específicos. - barranquismo - esquí de travesía.

Cada especialidad tiene características propias en técnicas deportivas, en entrenamiento, en materiales y en medicina deportiva. El punto en común que tienen todas, salvo la escalada deportiva, es que “el campo de juego” es la naturaleza que, con sus particularidades ambientales, modifica sustancialmente la actividad deportiva según la época del año, la altitud, la temperatura o la climatología del día. Por lo tanto este deporte es de gran complejidad por las diferentes técnicas que hay que utilizar, por los diferentes materiales para cada una, por la variabilidad del escenario del trabajo deportivo y por la necesidad de mantener un nivel de seguridad permanente, lo que hace que el montañismo precise un desarrollo profesional ordenado.
Entre los términos utilizados en el lenguaje de montañismo, se encuentran:
Primer ascenso - cuando se realiza por primera vez el ascenso en determinada montaña, o ruta de la misma.

Alpinismo, andinismo e himalayismo
A instancias del Tourning Club Argentino en el año 1939 se pidió a la Real Academia Española se le llamara Andinista al que escalara los Andes y se logró que fuera aceptada.
Es importante decir que los términos alpinismo, andinismo e himalayismo se utilizan a veces como sinónimos del montañismo, sobre todo el primero debido a que la actividad montañista moderna y sus escuelas se originan principalmente en Europa y es allí, en la cadena montañosa de los Alpes donde más se practicaba esta actividad. Por esta razón el término "alpinismo" se ha utilizado -y se sigue utilizando aún- como sinónimo de montañismo. Sin embargo el término montañismo refiere muchas actividades deportivas en las montañas, mientras que el alpinismo se refiere a los alpes o como algunas personalidades defienden, a la actividad de ascender montañas escarpadas, pues alpe significa montaña escarpada. Otros términos utilizados son el andinismo e himalayismo, cuyo origen es moderno pero que no tienen la misma base que alpinismo por lo que son términos locales que se refieren a la actividad de ascenso de montañas en los andes y el himalaya respectivamente.

Subir Montañas. Para reflexionar...

Que se saca de subir una montaña, de sudar, cansarse e incluso poner en peligro tu vida por algo que, como un día alguien me dijo, "subir para luego tener que bajar".

Lo que se experimenta al subir una montaña no es solamente la satisfacción de haber conquistado una cima, es, sobre todo, el haberse vencido a uno mismo, pasar por encima del dolor, del cansancio y saborear esa sensación de llegar, de fundirse con la montaña, con el viento, con el silencio, con la soledad.

Por eso entiendo que la vida es como subir una montaña en la que cada uno se encuentra con sus propias fuerzas, con sus limitaciones y con sus aspiraciones y, aunque no subas solo, nadie puede hacer nada por ti, son tus piernas, tus pulmones, y sobre todo, tu mente la que te hace seguir, ascender, superarte a ti mismo. No puedes esconderte detrás de nadie, ni echarle la culpa de tu cansancio o de tus fracasos, como se hace en la vida cotidiana. La montaña te demuestra que todo lo que tú vives depende sólo y exclusivamente de ti, de lo que quieras hacer, de lo que aspires a conquistar. La montaña te deja desnudo ante ti mismo, y como dice el montañero Messner: "Cada cual debe recorrer el camino adecuado para sí mismo, y cada uno de estos caminos es distinto a los demás".

Es ella, y sólo ella, la que marca las condiciones, la que dice si estás o no preparado, la que coloca al hombre en su auténtico lugar. Por ello, aunque estés solo nunca puedes olvidarte de que estás dentro de algo superior a ti, y la montaña, como la vida, se convierte en una fuente inagotable de lecciones donde acumulas éxitos y fracasos, pero sobre todo, donde aprendes a moverte y a vivir.

Hay muchas más cosas que enseña la montaña pero una de las más importantes es que muestra, sin aditivos ni colorantes externos, lo que hay auténtico dentro del hombre, lo que es verdad, lo que es natural, lo que está vivo en los niños y que por desgracia, los adultos han olvidado, y es la necesidad de aventura, el mirar hacia el futuro, hacia adelante, por eso no es extraño que cuando ya se está llegando a la cima de la montaña la mente ya esté planeando nuevas aventuras, y es que la forma natural de la mente es mirar hacia el futuro y no al pasado, porque el pasado sólo tiene de interesante la experiencia que te aportó, pero no puedes vivir de él porque ya no tiene nada, mientras que el futuro está ahí, libre, en blanco, esperando que cada uno lo escriba.

Tal vez por eso la montaña "engancha", porque conecta con lo que hay auténtico en nosotros mismos, con la necesidad de superación, de retos, de descubrimientos dentro.Por eso yo pienso que la vida es como subir una montaña, y que quien no esté en movimiento, trazando nuevos retos, mirando siempre hacia el futuro y creando nuevos sueños, simplemente no está vivo.

"Aquel que continuamente anda preguntando por los caminos nunca aprenderá a buscar o intentar su camino. ¿Cómo puede saber cuál es su camino alguien que siempre recorre caminos conocidos?" (R.Messner). Por Elena C. Gomez